Lucas Hernandez de 27 años es un joven originario de Santa Ana, CA. Tiene dos hermanas y dos hermanos y Lucas es el tercero de los hermanos e hijos de una pareja de inmigrantes del Estado de Guerrero, México.
El valor más importante que aprendió de su papá es buscar conocimiento e ir aprendiendo todo lo que se pueda. El valor más importante que le aprendió a su mamá es cultivar la paciencia.
Escuchando a sus compañeros Lucas aprendió que actualmente los trabajadores de Kingspan, no ganan lo suficiente para cubrir sus gastos básicos para vivir pues “tienen que ir a otros trabajos, tienen otro trabajo de fin de semana, o se van a recolectar botes para completar sus gastos. El tiempo que han estado ahí en la compañía no refleja tanto lo que gana la gente, muchos llevan más de treinta años trabajando y ganan menos del salario que le dan a los que van entrando como nuevos, lo que es menos de lo que deberían de ganar por los años que llevan trabajando ahí”.
Un poquito antes de la pandemia del COVID-19 ya empezaban a hablar de las condiciones de salud y seguridad en el trabajo. Lucas se inspiró en sus compañeros para unirse a la campaña, y empezó a aprender a organizarse con sus compañeros con más experiencia reflexionando sobre sus condiciones de salud y seguridad. Hablaron del aire que no estaba bien y que no tenían suficiente equipo para resolver ese problema que les afectaba a todos.
Lucas se convenció de que “las cosas son más profundas de lo que uno puede ver al principio."
Sabe que es difícil hablar de los problemas que los afectan. Pero aprendió que es posible al tener una conversación con compañeros de otras áreas de trabajo, Solía decirles; “a lo mejor hay algo que no te afecta a ti y a mí sí. Y es posible que tú tengas un problema que te está afectando y que no me afecta a mi, pero juntos podemos alzar la voz”. Aprendió a escuchar y a observar para organizar, a documentar los incidentes, a identificar los riesgos y cómo controlarlos, y reconocer el impacto que podrían tener si no se previenen. Con SoCal COSH y la guía de Eddie Sanchez, los trabajadores de Kingspan aprendieron sus derechos, siguieron los pasos para preparar su queja y la presentaron ante Cal/OSHA.
“Un líder es alguien que puede ayudar a ir en la dirección que quieres ir” dice Lucas, y aunque no está seguro cómo nació la confianza de sus compañeros en él, … expresa con modestia: “Siento que lo que me ayudó más a convertirme en un líder es que soy bilingüe, porque la gente a veces necesitaba traducción, o ayuda para entender un volante o información que daba la compañía.” Lo cierto es que Lucas y sus compañeros han construido una conexión y relación de solidaridad en el trabajo, porque él aprovechó que lo mandaban a cubrir a otros compañeros y ahora conoce a más compañeros de las diferentes áreas de trabajo.
Este mes, los trabajadores de Kingspan se unen para exigir salud, seguridad y reconocimiento en el trabajo. Preparándose para su acción del 20 de octubre, Lucas subraya la importancia de que la comunidad "esté ahí apoyándonos físicamente y [demuestre] que vamos a seguir luchando... Al fin y al cabo, lo único que queremos es que haya un contrato y que se nos reconozca oficialmente con SMART 170".
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